Me llamo Raquel Mulas. Llegué al collage en 2019 a través del periodismo, la profesión a la que me he dedicado durante muchos años. Un día cambié mi mirada hacia el papel. Pasé de contemplarlo como un simple soporte de información a concebirlo como un tesoro con posibilidades infinitas de creación artística.
Lo viví como pura magia. A partir de ese momento, inicié un viaje personal transformador.
Por un lado tenía la sensación de estar ofreciéndole una nueva vida a ese material; por otro, estaba descubriendo en mi una enorme necesidad de expresarme a través del arte.
En noviembre de 2020, uno de mis primeros collages fue seleccionado por el colectivo de collagistas Mujeres que cortan y pegan para la exposición Collage y Palabra, que se mostró en el Matadero de Madrid. Este hecho me impulsó a continuar indagando en la versatilidad de esta técnica. El collage me da la posibilidad de crear universos paralelos, de investigar con materiales y modos de hacer nuevos para mi, de plasmar en forma de composición todo aquello que ronda en mi mente y pertenece al subconsciente y de algún modo al absurdo.
Trabajar el collage cada día es un auténtico disfrute. En mi camino creativo descubrí, más tarde, el collage digital, técnica que abordo al igual que el trabajo analógico.
El collage ahora es parte de mi vida, pero siempre he estado cerca del mundo del arte. De hecho, en paralelo al ejercicio del periodismo me formé en cine, pintura, grabado e ilustración.
Si te apetece explorar tu capacidad creativa y manejarte en el arte del collage, apuntate a uno de mis talleres. Escríbeme si quieres que te informe de las nuevas fechas.
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